Miro al tel?fono. Permanece quieto, silencioso. La pantalla negra. Lo enciendo y un mont?n de iconos flotan sobre un fondo colorido. Pero no hay novedades, no hay noticias. No la que yo espero y deseo.

Tus palabras.

Tu mensaje.

Una nota de voz.

Tal vez una foto.

Pero no est?s al otro lado.

Muchos meses ya y sigues sin contestar.

Rastreo la red en busca de pistas tuyas, pero no encuentro nada. Vives desconectado.

?Por qu? sigo esperando?

?Y por qu? no seguir esperando?

?Por qu? sigo escribi?ndote?

?Por qu? no convertirte en un simple recuerdo?

Quiz?s as?, yo sola, mantengo la esperanza de que por aburrimiento contestes.

Pronto ser? tu cumplea?os y volver? a enviarte un gift, una musiquita o unas palabras. Y otro a?o m?s, no creo que haya respuesta.

Silencio al otro lado.

Me pregunto si alg?n d?a me cansar?.

La vida ya nos llev? a encontrarnos y reencontrarnos, ?habr? una tercera vez? Parece poco probable.

Pero queda el tel?fono, aunque la pantalla siga negra y el tono que tienes asignado no suene.

Queda la esperanza, la ilusi?n de saber de ti.

?Te casaste? ?Tienes hijos? ?Sigues en la Universidad? ?Por qu? no escribes en tu blog? ?Has viajado mucho estos a?os? ?Superaste alguna enfermedad???Has encontrado alguna respuesta a las preguntas que compartimos a la orilla del Guadalquivir?

?Cu?nto nos queda por contarnos!

Dicen que s?lo escribimos sobre aquello que hemos experimentado. Y entonces me pregunto yo, ?los que escriben y describen asesinatos los han cometido para conocer los sentimientos y pensamientos de los protagonistas? No lo creo. Pues no crean que todo lo que escribo ha sido vivido. A veces, tambi?n imagino.

?Tienen alg?n amigo o amiga que no contesta ya a sus mensajes? ?Cu?nto han tardado en dejar de intentar una nueva comunicaci?n?

 

This page is also available in: English