La madre de Sof?a es muy exigente. Tiene una idea clara de qu? es bueno y qu? es mejor; y para su hija quiere lo mejor.

Nunca ha expresado con palabras qu? es ?lo mejor?, no ha hecho una lista de m?nimos o cualidades imprescindibles, pero toda la familia sabe cu?les son sus preferencias. Sof?a en cambio, rebelde por naturaleza, no comparte la visi?n de su madre. La intuici?n y el coraz?n casan mal con las apariencias y con??as? tiene que ser porque siempre ha sido as??. Madre e hija est?n en continua lucha, una lucha oculta que no se verbaliza. Aquella rumia los fracasos de ?sta, mientras que ?sta, Sof?a, sigue descubriendo la vida en su propio caminar.

Sof?a ha conocido a un chico que ni es alto ni es guapo ni tiene posici?n.
??Le presentar?as ese chico a tu madre??, le pregunta una amiga directa al coraz?n de la situaci?n. Y enseguida, Sof?a descubre sus miedos. ?Volver a pasar por ese examen!
A lo mejor no es necesario (piensa ella).

This page is also available in: English