Generalmente no busco datos globales de un país antes de visitarlo; sin embargo, se despertó mi curiosidad cuando una amiga me preguntó sobre el número de habitantes de Vietnam. Así que vayamos con algunas generalidades en forma de datos y algo más.

El país tiene forma de letra S, más ancho al norte que al sur y muy estrecho en el centro (sólo 50 Km). La ciudad más poblada es Ho Chi Minh (Saigón) aunque la capital es Hanoi situada en el norte. La población total alcanza algo más de los 98 millones de personas y la densidad poblacional es de 246 hab/km2 (frente a los 94 hab/km2 en España, para hacernos una idea).

Junto a estos datos, en diferentes páginas de internet se pueden encontrar otras cuantificaciones como el PIB, puesto de su economía en el ranking mundial, índice de Gini que expresa las desigualdades económicas, la percepción de la corrupción o incluso su índice global de felicidad. En este último caso Vietnam ocupa el puesto 95 frente al 36 español para datos de 2018,¿significará esto que los españoles somos más felices que los vietnamitas?. Dejemos al margen tantos datos que voy de visita y no a invertir ni a hacer un trabajo para alguna asignatura de la carrera universitaria que cursé.

Vayamos a otras curiosidades. El idioma oficial es el vietnamita, nada extraño dirán ustedes. Pues eso, nada raro, pero hay algo que a mí me llamó la atención. Por viajes anteriores conozco que tanto Birmania como Tailandia tienen alfabetos propios, de ahí que al observar nuestro abecedario latino en la escritura vietnamita buscara la explicación.

Las fuentes consultadas (seamos honestos, la wiki y alguna página más ya que no soy filóloga (perdón Martina)) indican que esto se debe a la intervención del misionero jesuita francés Alexandre de Rhodes. El evangelizador mantuvo una estrecha relación con la corte de Hanoi hasta que cayó en desgracia y se trasladó, pero le dio tiempo a publicar en 1651 el “Dictionarium annamiticum” (lo de annamiticum es por la cordillera Annamita de la región).

El cambio de alfabeto no era un capricho, aquí no se da puntada sin hilo, las autoridades empezaron a adoptarlo en 1860 para impulsar de forma deliberada la ruptura de los lazos con China, con el pasado nativo y la literatura antigua. Si las nuevas generaciones no tenían acceso a su propia historia, era más fácil que las influencias del confucionismo chino dejaran el campo libre al cristianismo, y a la vez se neutralizaba a las élites tradicionales. Lo de imponer lengua y eliminar dialectos ni es nuevo ni ha terminado.

Aunque el alfabeto sea más parecido al nuestro, está lleno de signos diacríticos que permiten distinguir entre sonidos y tonos. Esto es algo que mi amiga Martina trataba de explicarme, pero que yo no alcanzaba a comprender, sólo una cosa quedó clara, se trata de una lengua difícil de aprender.

En Bangkok adquirí como obsequio para mi hijo Juan Francisco, las iniciales J F en el alfabeto tailandés que se puede ver en la foto, ahora los dos viajaremos juntos y lidiaremos en Vietnam con información escrita en signos más fáciles de reconocer para nosotros.

¡El dia de partida se acerca!

This page is also available in: English